Somos esclavos de la ilusión de este mundo. Vivimos prisioneros del miedo, la culpa, la duda… ¿Es por ignorancia o porque nos gusta la carcel? Acepta la redencion!
En el plano físico, tu no pagarias jamas una deuda que ya ha sido pagada por otro. Sin embargo en el plano espiritual eres esclavo del miedo, de la duda, tal vez de vicios y mas, pese a que alguien ya pago por tu libertad. El es Nuestro Redentor. Para comprender mejor seria muy bueno conocer el significado de la palabra Redencion.

De tanto escuchar repetir dentro de la religion la palabra «Redentor», tal vez por costumbre o por ignorancia, solemos impotentizar el poder que la misma encierra. Y cual es su poder?

Segun el Diccionario, hay varias acepciones muy significativas.
– Liberación de una obligacion, un trabajo, una situación desfavorable o de un dolor.
– Salvación y liberación del genero humano que, segun el cristianismo, hizo Jesucristo dando su vida en la cruz.
– Rescate que se pagaba para liberar de la esclavitud a los cautivos.
– Acción y efecto de redimir o redimirse.

La palabra “redimir” significa volver a comprar algo que originalmente era suyo pero que se había perdido. Si yo perdiera algo, y al hallarlo pagara de nuevo un precio para recuperarlo, lo estaria redimiendo.
Asi que, la redención significa volver a tomar posesión de algo al pagar un precio por ello.

Nosotros originalmente perteneciamos a Dios. Eramos posesión Suya, pero nos perdimos. Dios nunca renuncio a nosotros, sino que pago un gran precio para recuperarnos. Esto es la redencion.
El desea recobrarnos. Esto no es fácil pues nuestro ser se contamino.
Pero Dios lo pago por nosotros, recuperandonos a un costo sumamente alto. Su Amantisimo Hijo Jesucristo murio en la cruz para pagar nuestra redención eterna.
Conocer la Redención nos hace ver el gran valor que tenemos como seres humanos a los ojos de Dios.
Entonces entendemos que solamente los verdaderamente redimidos entienden y aprecian a su Redentor.
Ahora es tu momento: Acepta la redencion!

Ademas de la propia subestimación de esta palabra, tenemos montones de enemigos internos encargados de hacer cumplir nuestro decreto de subestimación de la redencion. Seria lo mismo que estar ahogandose y ver junto a uno a un salvavidas y tener tan firme creencia de que ese objeto es incapaz de mantener a nadie a flote, que uno terminara hundiendose sin siquiera intentar sujetarse. Nuestra tabla de salvación es el Cristo Redentor, si verdaderamente lo creyésemos el mundo de la Dualidad se disolveria en instantes.
Aprecia el altisimo valor de la redención. Acepta la redencion!

Brinda Mair