[su_dropcap]3[/su_dropcap]Aceptación o rechazo en las redes sociales: La red social decide si existes o no. Como afecta este enjuiciamiento a adolescentes y adultos.
El mundo entero coexiste en las redes sociales. En toda sociedad el individuo debe sentir que esta integrado como miembro. Si no se puede reflejar en sus semejantes, se siente descastado, un paria social.

Esto es lo que experimentan intensamente los adolescentes. Ellos viven pendientes del juicio exterior tal como en la Antigua Roma esperando no ser rechazados por «sus amigos» de las redes sociales lo cual implicaria su destierro, su dejar de existir. Por eso muchos se suicidan… o inclusive hay quienes anuncian su próximo crimen con la finalidad de ganar su minuto de gloria ¡Que terrible!

Las redes sociales vibran en el plano Astral Planetario y movilizan al mejor estilo del espiritismo del siglo pasado, las emociones mas bajas de la gente y cuando esta por libre albedrio se sumerje en su perversion, actuan como demonios encarnados que no dudan en empujar al otro hacia el abismo o bien se mantienen impavidos viendo como se suicida.
La Misericordia huye despavorida en donde el astral demoniaco toma el reino de Internet.

Con los adultos es un poco distinto. Existe lo anterior, pero también el adulto que ha vivido mas tiempo sin que las redes sociales existieran, siente una desconexión mayor cuando el mundo físico lo abandona: cuando pierde su trabajo, cuando ya no tiene forma de sentirse util y no encaja ya en la estructura en que vivia no por culpa propia sino porque esta ha mutado y ya no existe. Ya no puede esperar a jubilarse como su padre o su abuelo con 40 años de servicio en la misma empresa, eso es cosa de otro tiempo que la evolución del mundo dejo atras. La generación que quedó atrapada en el medio y que no puede seguir los modelos que recibio ni acomodarse al nuevo orden caotico de este mundo es la que lo esta sufriendo mas. Si pierde o anula la capacidad de generar los recursos para satisfacer sus necesidades, siente que el mundo le cierra las puertas. Ese es el preciso momento en que se siente desconectada. Si tiene quien satisfaga sus necesidades para mantener su tren de vida, se anestesiara con las fotos y los likes de las redes para no pensar, pero si no tiene de que vivir y su sustento se escapa provocado una mutación que es incapaz de asumir porque sin darse cuenta perdio el tren que paso, se desesperara.

Brinda Mair
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