Un requisito para canalizar es volverse interdimensional. Ese es el desafío de la maestria junto con otras condiciones necesarias para canalizar luz que veremos a continuacion.

Cuando una persona comienza a canalizar luz la energía que percibe de lo superior, abruma al ser inferior y le dificulta expresar en palabras lo canalizado porque su mente y su personalidad aun adolecen de códigos para transmitirlo con claridad. Lo transmitido puede resultar hermetico para quien lo escuche y llevara un proceso por parte del canalizador el volverlo comprensible para otros.

Para ello debemos:
1- Reconocer nuestros limites, nuestro territorio, en definitiva, saber Quien se es.
2- Contemplacion: comprender la grandeza del plan de Dios en sí mismo.
3- Hacer espacio soltando el anatema (El anatema es lo que se debe soltar al atravesar una crisis y evolucionar).

El estado contemplativo de la canalización llega cuando uno se libera de creencias, emociones y limitaciones en general que ocupan su espacio impidiendole crecer, evolucionar y reconocer quien es. Si la canalización es eventual se vivira como una iluminación espontanea. Ocurre todo el tiempo a todo tipo de personas.

Analicemos algunos puntos:

¿Por qué no se puede soltar?
Pues por miedo…
Miedo a no tener
Miedo a la soledad
Miedo al futuro…
Cosas de la ilusión

Muchas veces el anatema no reconocido es una situación que pudo haber sido buena en un principio pero que luego se estanco. Esto puede ocurrirnos en una relación de pareja que no crece o en un trabajo al que nos llego el tiempo de dejar atras por otro que nos permita crecer.

Cuando nos llega el momento de soltar y por libre albedrio no lo podemos hacer, el karma lo hace por nosotros para obligarnos a actuar. Si nos enojamos o nos bloqueamos en la lastima por nosotros mismos por lo que nos ocurre, cancelamos la Gracia y retomamos el anatema.

Si una situación es para ti contradictoria, permitete dejar aflorar tus emociones negativas pero atencion!: No te perpetues en ellas. Si lo hicieras, correras el riesgo de que el objeto de tu enojo ya sea una mala pareja o un trabajo que te disgusta o lo que fueres se convierta en un idolo con pies de barro. Por karma diariamente te someteras a el, hincandote, llorando por tu mala suerte o súplicando internamente que lo que el Espejo te muestra desaparezca de tu vista.
Sabe que será en vano porque es tu propia energía la que te ata a esas circunstancias.

La Maestria del Alma no significa ni aguantar, ni frustrarse mientras ahogas a tus egos inferiores (emocional, mental y/o físico) para que no muestren sus emociones. Si los reprimes tras la Mascara, mostraran su descontento enfermandote.

La Maestria Verdadera del ser inferior que busca el camino de la espiritualidad es No perpetuarse en el error más que el tiempo necesario. Esto nos permitirá convertir al error o la desgracia en una plataforma de Ascensión entregando al Ego al Padre Madre Dios.
Cuando no se puede hacer esto, terminaremos echandole la culpa a otro -nuestro Espejo-, acusandole de engañarme o de traicionarme. O bien, culpare a quienes me despidieron luego de «tantos años de servicio dedicado…» cuando fui yo (mi Ego) quien no pudo percibir el momento exacto en que mi ciclo allí termino.

Que el Espíritu nos guíe Siempre
Un abrazo desde el Alma
Brinda Mair